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Al manejar un negocio es importante dominar algunos conceptos financieros que te ayudarán a mantener la salud financiera de tu empresa, es por eso que en este artículo conocerás sobre la rentabilidad y el estado de resultado.
Comencemos por hablar sobre la rentabilidad de un negocio, la cual se refiere a la capacidad de generar beneficios o ganancias en relación con la inversión realizada. Cabe destacar que esta es una medida clave para evaluar la eficiencia y el éxito financiero de toda empresa.
Existen varios elementos que determinan la rentabilidad de un negocio. A continuación, te compartimos los principales:
Ingresos: es el dinero que ingresa al negocio a través de las ventas de productos o servicios. Cuanto mayores sean los ingresos, mayor será la posibilidad de generar una rentabilidad.
Costos y gastos: estos son los desembolsos necesarios para producir y vender los productos o servicios, tales como el costo de los materiales, el pago de salarios, los gastos operativos, los impuestos, entre otros. Para lograr una alta rentabilidad, es importante controlar y minimizar estos costos y gastos.
Margen de beneficio: es la diferencia entre los ingresos y los costos directos asociados a la producción o prestación de servicios y representa el porcentaje de ganancia obtenido sobre cada unidad vendida. Es importante saber que entre más alto sea el margen de beneficio esto indicará una mayor rentabilidad.
Eficiencia operativa: la eficiencia operativa se refiere a cómo se utilizan los recursos disponibles para generar ingresos.
Gestión de activos: hace referencia a la gestión eficaz de los inventarios, las cuentas por cobrar y los activos fijos, ya que estos elementos pueden influir en la rentabilidad. Un manejo adecuado de estos activos puede reducir los costos y mejorar la eficiencia.
Endeudamiento: el nivel de endeudamiento de un negocio, es decir, la cantidad de deudas contraídas, también afecta a la rentabilidad. Un endeudamiento excesivo puede generar mayores costos financieros y disminuir la rentabilidad.
Luego de conocer qué es la rentabilidad y los elementos que la determinan es necesario hablar sobre el estado de resultado, uno de los informes que debes generar en tu negocio ya que muestra información sobre los ingresos, gastos y resultado neto de un negocio durante un periodo determinado, que generalmente es de un año.
Imagina que tienes una pequeña tienda de ropa. El estado de resultados te mostrará cuánto dinero has ganado por la venta de productos, es decir, tus ingresos, los cuales pueden provenir de las ventas de ropa, accesorios u otros artículos que ofrezcas.
Por otro lado, el estado de resultados también reflejará los gastos que has tenido para mantener tu negocio funcionando. Estos gastos pueden incluir el costo de los productos que compras para vender, los salarios de tus empleados, los alquileres o servicios, entre otros.
La diferencia entre tus ingresos y tus gastos se conoce como el resultado neto o la utilidad (si tus ingresos superan a tus gastos) o la pérdida (si tus gastos superan a tus ingresos). Este resultado neto es una medida de cómo le está yendo a tu negocio financieramente durante el período analizado.
En resumen, podríamos decir que el estado de resultados te permite:
• Identificar las fuentes de rentabilidad de tu empresa.
• Identificar los escapes que afectan la rentabilidad de tu negocio.
• Medir cuáles fueron las ventas del negocio.
• Generar los datos sobre los costos y gastos en que incurrió la empresa durante un año.
• Conocer cuál es el dinero que queda luego de restar los costos y gastos de la empresa.
Ahora que conoces la importancia de medir la rentabilidad de tu negocio con la ayuda del estado de resultados, te invitamos a que profundices aún más este concepto y otros estados financieros en nuestro curso “Analizando los resultados para mejorar las finanzas de tu negocio”.
