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De lo poco nace lo mucho, lo mismo con las finanzas personales por ello los gastos hormiga deben regularse, entendiendo que estos son aquellos consumos de pequeños montos que no afectan tu presupuesto, pero que al irse acumulando con otros generan un alto impacto en la consistencia de presupuesto familiar.
Algunos de los gastos hormiga más comunes:
- El café que compras todos los días.
- Adicional a la merienda, dar dinero a tus hijos para comprar algún antojo.
- Comprar comida fuera de casa.
- Realizar actividades sociales no planificadas.
- Comprar un dulce o un juguete a los niños cada vez que sales.
- Comprar agua u otros alimentos cuando sales.
- Comprar libros de dibujos a los niños cada vez que vas al supermercado.
Generalmente realizas este mismo tipo de gasto frecuentemente y nunca son planificados, por el contrario, la mayoría de las veces responden a un impulso, por lo que al final de mes no llevas un cálculo de lo gastado.
Técnicas para controlar los gastos hormiga
El primer paso es identificar cuáles son tus gastos hormiga y, para ello, debes llevar un registro durante un mes sobre todos tus consumos.
¿Cómo hago ese registro? Guarda cada uno de tus recibos y regístralos en una hoja de cálculo, aplicación para teléfonos móviles o lleva una libreta contigo donde anotes todos tus consumos, pagos, propinas, etc. Acompañada de una breve descripción de cada uno de ellos.
Al final de cada semana, y de cada mes, has una suma de todos ellos, así sabrás la cantidad de dinero exacto que gastas fuera del presupuesto del hogar.
Aquí te compartimos algunas recomendaciones para controlar tus gastos hormiga y llevar una buena salud financiera.
1. Destina una cantidad determinada mensualmente para los gastos hormiga. Ya sea para el café o el refresco diario. Esto evitará que afectes tu presupuesto y llevarás un mejor control de tus finanzas.
2. Haz tus comidas y meriendas en casa. Así evitarás tener que comprar comida fuera o gastar en antojos.
3. Reduce tus salidas. Determina cuántos días al mes puedes gastar en salidas sociales con tu familia o amigos.
4. Utiliza termos o envases reutilizables para el agua. Además de cuidar del medioambiente, cuidarás tu bolsillo al no gastar innecesariamente comprando botellitas de agua para ti o tus niños.
5. Planifica las meriendas de los niños semanalmente. Haz un menú junto con tus hijos para elaborar meriendas divertidas y a la vez saludables para ellos.
6. Guarda tus monedas. Por más mínimo que sea, al realizar algún pago, guárdalas en una alcancía o mantén un monedero exclusivo para ellas.
7. Haz una lista para la compra del supermercado. De esta manera evitarás llevar algo innecesario o comprar por impulso. En nuestro artículo “10 Consejos para comprar en el supermercado y no gastar de más” podrás encontrar algunas recomendaciones útiles para controlar los gastos hormiga al hacer tu compra.
Con estas recomendaciones podrás disminuir la fuga de dinero de tu billetera y llevar unas finanzas saludables en tu hogar cumpliendo con las metas financieras que tienes con tu familia.
Finalmente, planificar todos tus gastos en tu presupuesto familiar es lo que te permitirá materializar todos los sueños y metas que tienes con tu familia. Si aún no sabes cómo elaborar un presupuesto te invitamos a que hagas clic en el siguiente enlace para acceder al curso: Presupuesto, la clave para tu transformación financiera.
